Es curioso como no puedo parar de sentir que hay mil cosas que quieren salir de mi, que si no, voy a explotar. Y ahora estoy aquí. Con un espacio en blanco delante de mi para plasmar lo que quiera sin límites ni restricciones.
Pero me quedo en blanco y no lo entiendo. No lo entiendo porque llevo mucho tiempo queriendo vomitar mil cosas, y cuando tengo la posibilidad de hacerlo, simplemente no me sale.
Echo de menos ser quien era, aquella niña que escribía mil historias sin problemas. Demasiado soñadora y fantasiosa. Supongo que esto se llama madurar, o crecer. Pero digan lo que digan, me gustaba antes y me echo de menos.
Pero me quedo en blanco y no lo entiendo. No lo entiendo porque llevo mucho tiempo queriendo vomitar mil cosas, y cuando tengo la posibilidad de hacerlo, simplemente no me sale.
Echo de menos ser quien era, aquella niña que escribía mil historias sin problemas. Demasiado soñadora y fantasiosa. Supongo que esto se llama madurar, o crecer. Pero digan lo que digan, me gustaba antes y me echo de menos.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarSi un día lo fuiste... ahora eres aún más capaz de volver a serlo...
ResponderEliminarQuien ha tenido sueños y fantasías viviendo dentro de si mismo, seguro volverá a disfrutar de la compañía de ambos... es más, los huéspedes que vengan ahora serán aún más interesantes... No te eches de menos, al fin y al cabo sigues siendo tú...¿No? ;D
Gracias. No sé muy bien por qué pero esas palabras me alegraron el día! =)
ResponderEliminarY eso espero... al fin y al cabo...sigo siendo yo =)